sábado, 3 de octubre de 2015

Culturas Pre Incas

 historiografía 


PERÙ Y UN MUNDO DISTINTO

De varios países de América del Sur, el término preincaico o preínca designa a las realidades históricas que existieron en un territorio determinado antes de la anexión del mismo al Tahuantinsuyo (el Imperio inca). Se extendió por gran parte de la Cordillera de los Andes por un breve periodo entre 1438 y 1532, fecha de la Conquista del Perú por los invasores españoles.





Algunas culturas pirenaicas fueron parte del proceso cultural del cual nació el estado incaico, en el seno de la tradición peruana; otras, en cambio, tuvieron solo contactos esporádicos o breve influencia de o sobre las culturas del Antiguo Perú.


Las investigaciones arqueológicas precolombinas sobre América designan a Mesoamérica y los Andes centrales, como los núcleos que generaron los procesos culturales más complejos. Aquí la ciudad y el estado son las expresiones culturales y políticas más logradas de su evolución.En ambas áreas, en los primeros cinco siglos de nuestra era, la 
ciudad y el estado se manifestaron prístinamente,
 como producto de largos procesos autónomos 
de experimentación y descubrimiento.



Al momento de la expansión de los incas, los pueblos de América del Sur presentaban niveles de complejidad social distintos y su desarrollo histórico no fue parejo ni homogéneo. Las civilizaciones más antiguas de Sudamérica surgieron en la costa central del Perú hacia el IV o III milenio a. C. y fue extendiéndose a lo largo de más de cuatro milenios de historia; tras suscitarse nuevas tradiciones culturales hacia el siglo II a. C., éstas se extendieron primero al Altiplano y luego fueron extendiéndose hasta latitudes como el noroeste argentino, donde las primeras sociedades complejas aparecen en el siglo XIII. Otros pueblos conquistados por el ejército incaico fuera de la co-tradición andina se organizaban en señoríos étnicos o jefaturas independientes sin ningún aparato estatal de por medio. En la costa de Ecuador surgen las primeras jefaturas hacia el IV milenio a. C., entretanto los pueblos del Chile central entrarán a la revolución agrícola recién en el II milenio de nuestra era. En las restantes regiones del subcontinente, como es el caso de la Amazonia, el Chaco y las Pampas, las sociedades no habrían alcanzado complejidad mayor a la tribal.